Arrugas causadas por estrés: cuáles son y cómo prevenirlas

El estrés se ha convertido en una de las causas más comunes por las cuales aparecen esas molestas líneas en nuestro rostro.

La aparición de las arrugas en nuestro rostro son algo inevitable y, estemos listas o no, es un proceso natural de la vida. Sin embargo, de nosotras depende que tan rápido estas lleguen a nuestra vida.

Las arrugas también pueden ser consecuencia de nuestro estilo de vida como lo que comemos, si realizamos ejercicio, la cantidad de agua que ingerimos y los niveles de estrés que manejamos durante el día. Este último se ha convertido en una de las causas más comunes por las cuales aparecen esas molestas líneas en nuestro rostro.

Para conocer más sobre este tema, el doctor Eric First explicó a Vogue los tipos de arrugas que pueden ser causadas por el estrés y cómo prevenirlas.

Líneas de expresión 
También conocidas como “líneas de preocupación” aparecen luego de pasar largos periodos de estrés, no dormir lo suficiente, al no ejercitarnos y sobretodo, cuando nuestra alimentación no es adecuada.

“Se cree que las arrugas por estrés se producen como resultado del estrés crónico, típicamente estrés psicológico, y factores de estrés ambientales”, explica el experto. “La región facial es típicamente donde son más comunes”.

Es por ello que las arrugas por estrés suelen aparecen en la zona de nuestra frente y entre las cejas.

Las diferencias entre arrugas

Las arrugas causadas por la edad se producen ante la disminución de colágeno y elastina en nuestro cuerpo. Puedes disminuir si visibilidad al cuidar tu rostro con protector solar, una buena alimentación y consumir los nutrientes que tu piel necesita.

Por otra parte, las arrugas causadas por estrés se forman ante el acortamiento de los telómeros en aquellas personas que suelen experimentar estrés psicológico a largo plazo. En caso de que tengas más de 30 años y estés bajo estrés psicológico, puede que estas aparezcan.

Cómo prevenir las arrugas causadas por estrés

Opta por las rutinas
Las rutinas te ayudarán a mantener un orden en tu vida diaria y poco a poco verás que también el estrés se irá reduciendo. Puedes crear rutinas de tu trabajo, de ejercicio, y hasta para pasar tiempo libre.

Bebe agua
Al estar bajo demasiado estrés, puede que olvidemos beber agua y por lo tanto, solemos deshidratarnos. Por ello, es importante mantener hidratada nuestra piel tanto de manera externa e interna.

Duerme bien
cumplir con tus 8 horas de sueño es importante para que nuestro cuerpo repare los daños en la piel de manera natural.

Modifica tu estilo de vida
Para obtener resultados rápidamente, recuerda que el secreto es llevar un estilo de vida más saludable. Lleva una dieta saludable, limita el consume de alcohol y evita fumar cigarro.

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