A continuación te decimos paso a paso cómo se hace.
Conocer qué tipo de piel tenemos es de suma importancia debido a que de esta manera sabremos cómo cuidarla, maquillarla e incluso lavarla.
Como muchas saben, existen 3 tipos: mixta, grasa y seca. La piel grasa, como su nombre lo dice, suele ser brillosa debido al cebo que se desprende. La seca suele sentirse tirante y verse agrietada debido a la falta de hidratación. En cuanto a la mixta, es una combinación de ambas.
La piel grasa y cómo lavarla
En esta ocasión nos enfocaremos en la piel grasa y cómo es que debe lavarse correctamente para evitar más cebo y acné.
Según especialistas, es importante lavarse la cara a diario para ayudar a eliminar la suciedad y la grasa de la piel. Si tienes la piel grasa, puedes considerar lavarte la cara dos veces al día. Los lavados con ácido salicílico pueden ayudar a eliminar las células muertas de la superficie de la piel y ayudar a limpiar la grasa.
Los limpiadores que contienen ácido salicílico pueden ser irritantes y causar sequedad, así que no los laves demasiado. Lavarse demasiado con cualquier limpiador puede ser perjudicial para la piel. No solo puede irritarse la piel, sino que también puede provocar una producción excesiva de grasa. Cuando la piel se seca debido a sus aceites naturales, paradójicamente reacciona produciendo más grasa, lo que a su vez puede provocar brotes de acné.
Una rutina regular de limpieza suave, hidratación y protección solar es una necesidad para las personas con piel grasa. Lávete la cara dos veces al día y siempre haz un seguimiento con una crema hidratante para mantener tu piel equilibrada.