Si tienes manchas esta sustancia puede ser la solución.
La vitamina C se ha convertido en un elixir en la industria de la belleza pues es una de las sustancias que ayuda a mejorar la calidad de nuestra piel, ya sea si la consumimos en frutas o en productos.
Son múltiples beneficios los que encontramos en esta vitamina, entre ellos está las reducción de líneas de expresión y arrugas, la estimulación de colágeno, mejora la textura y reduce las manchas de nuestra piel.
Además es un aliado para las pieles sensibles pues minimiza la irritación y hace más efectiva la absorción de cremas. Al aplicar la vitamina C en tu rostro, se logra tener una piel lisa, limpia y reluciente. Simplemente mejora la calidad del órgano más grande de nuestro cuerpo.
En la actualidad encontrarás varios productos de esta sustancia, entre ellos los famosos serums, los cuales puedes usar haciendo énfasis en las manchas. Cabe señalar que siempre se debe de aplicar de noche y después de una limpieza facial, según recomendaciones de especialistas.
La vitamina C puede comenzar a usarse a partir de los 21 años de edad. En pieles más jóvenes deberá usarse de entre 2 y 3 veces por semana.
Contraindicaciones.
Personas que tienen pieles con eczema, o en casos de pieles muy bronceadas, extra sensibles, alérgicas, herpes o verrugas, preferible evitar su uso.