Ana Araujo además destacó que, para ella, unos segundos de inconsciencia no definen al actor como persona.
Ana Araujo, esposa de Pablo Lyle, estuvo presente en la corte de Miami, el pasado viernes, con la intención de ofrecer un testimonio final ante la jueza Marisa Tinkler, antes de saber el veredicto final del actor.
Araujo enfocó su participación en destacar y describir lo mal que la pasó el famoso tras enterarse del fallecimiento del señor Juan Ricardo Hernández.
“Pablo estuvo vomitando, no podía dejar de llorar, no podía creer que el señor había trascendido, desde hace cuatro años, cuando todo sucedió, hemos atravesado una serie de acontecimientos y desde ese entonces no hay un momento que no hemos pasado juntos en familia y que no bendijéramos a la familia de Hernández”, relató Araujo, esposa de Pablo Lyle.
Desmintió que fuera una persona violenta
La esposa del actor afirmó que Lyle nunca habría tenido comportamientos violentos en el pasado, sino todo lo contrario.
“Pablo nunca fue una persona violencia, siempre ha sido conciliador que siempre busca ver por el bien de los demás y que vela por nosotros, por eso ha sido algo muy impactante para todos”, detalló Araujo.
Para finalizar, la esposa del mexicano dijo que estaba muy orgullosa de él y le recalcó que para ella, unos segundos de inconsciencia no lo definen como persona.
“Estoy muy orgullosa de ti Pablo, porque para muchos puede ser fácil juzgar una reacción inconsciente de unos cuantos segundos que no te definen como persona, pero no todos pueden ver lo que yo he visto. He sido testigo de tu dolor, tu sufrimiento y tu espíritu. Siempre te lo he dicho, eres un corazón con patas. Eso es Pablo”, concluyó.