Las generaciones aseguran que el costo de asistir a bodas les ha impedido alcanzar sus metas financieras.
Las bodas pueden ser un evento muy especial en el que se celebra el amor y la unión; no obstante, no todo a su alrededor suele significar algo positivo, especialmente cuando de inversión se trata.
Según un nuevo estudio, más del 46 % de las personas en la demografía millennial y Gen Z se sienten agobiados por el alto costo de asistir.
Recibir una invitación para una boda significa que debes considerar tu posición financiera. Si decide unirte a las festividades te compromete a realizar todos los viajes necesarios para llegar al lugar, posiblemente pagando una estadía de una noche en un hotel, comprando un regalo de bodas y tal vez incluso comprando nuevos atuendos para la celebración. Y si se trata de un fin de semana de bodas de destino, esos gastos simplemente aumentan.
A medida que las personas se casan más que nunca y la inflación aumenta los precios de casi todo en 2022, la carga financiera de ser un invitado a la boda se siente más que nunca.
El estudio
Según un nuevo estudio de Prudential, el auge de las bodas de 2022 se atribuye a la creciente brecha generacional de riqueza. En un estudio realizado con 4796 adultos, incluidos 477 Gen Z, 1458 millennials, 1223 Gen X y 1430 baby boomers, la demografía millennial y Gen Z está sintiendo el costo financiero más que nadie.
"Las generaciones más jóvenes sienten grandes desafíos y ansiedad por administrar el dinero, luchando por equilibrar 'vivir en el ahora' con ahorrar a largo plazo", informa Prudential. ¿Un gran gasto que viene con "vivir en el ahora"? Bodas.
Los resultados indican que el 46 % de los millennials y el 48 % de la Generación Z creen que podrían gastar más en objetivos personales si no tuvieran que gastar en los hitos de la vida de amigos y familiares, como los regalos de boda.
No son solo las bodas las que contribuyen a esta creciente división. Que te pidan que seas parte de una fiesta de bodas también es otro compromiso financiero que muchas personas en la demografía Gen Z y millennial están experimentando. Las damas de honor y los padrinos de boda tienen que asistir a más eventos de bodas, comprar atuendos designados por las parejas y, potencialmente, pagar por servicios como peluquería y maquillaje.
Esas celebraciones previas a la boda, en particular las despedidas de soltero y soltera, pueden ser grandes inversiones por sí solas. Otro estudio reciente de Savings.com mostró que la celebración promedio le ha costado a los asistentes $ 1,500 en 2022, siendo los costos de viaje el mayor contribuyente al precio.
Las parejas comprometidas aún deben planear la boda de sus sueños, pero hay algunas formas en que pueden disminuir los compromisos financieros que les piden a los invitados. Si desea que sus celebraciones sean más asequibles para sus asistentes, considera organizar tus eventos cerca de casa o en un lugar nacional cerca de un aeropuerto importante. También puedes aliviar la carga financiera de las personas en su cortejo de bodas brindando pautas para la vestimenta en lugar de pedirles a todos que compren un estilo que podría estar fuera del rango de precios de todos, u organizar sus despedidas de soltero y soltera localmente.