Una prenda en tendencia que promete mantenerte cálida.
Las tendencias otoñales tienden a ser prendas de franela, suéteres y cálidos chalecos. No obstante, exite otro elemento básico para ayudarnos a realizar la transición de estación: la chaqueta acolchada.
Las chaquetas acolchadas ligeras ofrecen una buena alternativa a las lanas pesadas y las parkas gruesas que dominan la temporada de invierno.
Cuando las temperaturas bajan pero no hace mucho frío, simplemente puedes colocarte una de estas prendas en una variedad sólida o estampada, y una vez que lleguen las temperaturas gélidas, puedes incorporarla como una capa debajo de los abrigos más grandes.
Acolchar se refiere al proceso de coser varias capas de tela, y la palabra proviene del latín "culcita", que significa cojín o colchón. Según los informes, la evidencia más temprana de prendas acolchadas se remonta al Antiguo Egipto, y los hombres medievales a menudo usaban chaquetas acolchadas conocidas como gambesones debajo de su cota de malla.
¿Cómo se llevará?
Este tipo de prenda normalmente hace buena mancuerna con pantalones de mezclilla, zapatos y tenis, aún así, la puedes llevar sin importar que lleves vestido o falda.
Úsala cómo más te parezca, al final de cuentas cumplirá su función más especial, el mantenerte cálida mientras luces una prenda en tendencia.