La respuesta te sorprenderá y es muy probable que hayas pasado alguna vez por lo mismo.
Según información de un reciente estudio, esto puede tratarse más por la otra persona, en un acto de empatía de la que decide quedarse.
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El estudio, que se publicó en la edición de noviembre de 2018 del Journal of Personality and Social Psychology, exploró la posibilidad de que las personas que deciden terminar una relación consideren no solo sus propios deseos sino también cuánto creen que su pareja quiere y necesita la relación para Seguir.
"Mientras más personas dependientes creían que su pareja estaba en la relación, menos probable era que iniciaran una ruptura", dijo Samantha Joel, autora principal. Joel, quien fue profesor asistente en el Departamento de Psicología de la Universidad de Utah y sigue siendo profesor adjunto en la U, ahora es profesor asistente en la Universidad Western en Ontario, Canadá.
Investigaciones anteriores muestran que la cantidad de tiempo, los recursos y la emoción invertidos en una relación pueden ser factores para decidir terminar una relación romántica. Los estudios también muestran que una persona puede optar por permanecer en una relación insatisfactoria si la alternativa parece menos atractiva.
¿Quedarse o irse?
En esos casos, la decisión de quedarse o irse se basó en el interés propio, dijo Joel. Pero el nuevo estudio muestra la primera evidencia de que las decisiones sobre una relación romántica insatisfactoria pueden tener un componente altruista.
"Cuando las personas percibían que la pareja estaba muy comprometida con la relación, era menos probable que iniciaran una ruptura", dijo Joel. "Esto es cierto incluso para las personas que no estaban realmente comprometidas con la relación o que estaban personalmente insatisfechas con la relación. En general, no queremos lastimar a nuestras parejas y nos preocupamos por lo que quieren".
Al tomar esa decisión, la pareja infeliz puede esperar que la relación mejore, dijo Joel.
"Una cosa que no sabemos es cuán precisas son las percepciones de las personas", dijo Joel. "Podría ser que la persona esté sobreestimando cuán comprometida está la otra pareja y cuán dolorosa sería la ruptura".
Decidir quedarse basándose en la dependencia percibida de una pareja en la relación podría ser un arma de doble filo, dijo Joel. Si la relación mejora, fue una buena decisión. Pero si no es así, se ha prolongado una mala relación.
También está la cuestión de si quedarse por el bien de la pareja es realmente algo prosocial.