Esto es lo que recomiendan expertos.
La aparición de granitos en la zona genital, en particular en la vulva, puede ser motivo de preocupación e incomodidad. ¿Por qué aparecen estos granitos? ¿Cómo debemos actuar para manejarlos adecuadamente?
La vulva es una zona del cuerpo que contiene piel y folículos pilosos donde crece el vello. En la base de estos folículos, se encuentra una pequeña glándula que segrega una pequeña cantidad de grasa. En ocasiones, esta glándula se obstruye, lo que lleva a una acumulación de grasa y al crecimiento de un grano. Cuando las bacterias de la piel, como el estreptococo o el estafilococo, infectan esta área, el grano puede inflamarse, causando dolor y molestias.
¿Qué hacer?
Cuando te encuentres con un grano en la vulva, es importante recordar que no debes tocarlo ni intentar exprimirlo. Manipularlo puede dañar la piel y causar infecciones adicionales. Además, evita depilarte en esa área y en su lugar, recorta el vello con tijeras para no lastimar la piel ya irritada. Lava la zona cuidadosamente con agua y geles de limpieza suaves, evitando el uso de jabones agresivos.
Una vez que hayas limpiado la zona, permítele respirar y, si es necesario, aplica calor local de forma segura para ayudar a que el grano madure. Si el grano es grande y doloroso, se recomienda consultar a un profesional de la salud, como tu ginecólogo, médico general o dermatólogo, para un tratamiento adecuado. Pueden extirparlo con las medidas de asepsia y antisepsia necesarias.
¿Cómo evitarlos?
- Evita usar ropa ajustada cuando tengas granitos en la vulva, ya que esto puede empeorar la irritación.
- Recorta tu vello púbico en lugar de rasurarlo o depilarlo para prevenir nuevas lesiones.
- No intentes apretar o exprimir los granitos, ya que esto puede provocar una infección.
- Consulta a un profesional de la salud si tienes dudas sobre el diagnóstico o si sospechas que podría tratarse de una enfermedad de transmisión sexual u otra afección.
Recuerda que, en la mayoría de los casos, estos granitos son inofensivos y pueden tratarse con los cuidados adecuados. Sin embargo, si tienes preocupaciones o dudas, no dudes en buscar el consejo de un profesional de la salud para una evaluación completa. Tu bienestar íntimo es fundamental y merece ser atendido con precaución y cuidado.