Sí.
Salir de la zona de confort debería convertirse en uno de los objetivos de todo individuo que planea cumplir sus metas, sea cual sea el ámbito del que se esté hablando.
Es por eso que no se descarta el tema erótico, pues tener una vida sexual plena definitivamente contribuye a la salud y buen humor, por lo tanto, para hacer memorable cualquier momento de intimidad, será necesario retarse a uno mismo, así como a la pareja, para hacer del encuentro uno inolvidable, cada vez que lo hagan.
Dicho lo anterior, hoy te compartimos una de las posiciones sexuales más conocidas, pero quizá un poco olvidadas debido al compromiso que se debe tener para llevarla a cabo. Hablamos de la amazona.
Sin duda alguna, esta posición sexual estará controlada por las mujeres, pues ellas serán quienes dominarán en la situación, por lo que el hombre deberá confiar plenamente en la mujer con la que está.
¿Cómo se hace?
Lo primero es que el hombre se acueste en la cama - el piso o lo que sea, pero tiene que estar acostado - para posteriormente doblar las piernas hacia arriba, con las rodillas apuntando al pecho.
Una vez que encuentres el equilibrio en esta postura, la mujer se sentará, a modo de cuclillas, sobre la parte posterior de las piernas de su pareja viéndolo a la cara, permitiendo el roce del pene y la vulva.
De esta forma, ambos tendrán libres las manos para hacer lo que deseen con ellas y contribuir al placer del otro.
Aunque suene un tanto confuso, seguramente esta ilustración te ayudará a orientarte para que puedas lograrla.