Todo este tiempo hemos estado atribuyendo el placer a zonas erógenas cuando no es así, al menos no del todo.
Cuando se experimenta un orgasmo éste no solo tiene que ver con el cuerpo sino también con tu cerebro, y es que al detectar los estímulos los guarda y potencia enviando impulsos nerviosos a los músculos.
De forma general, se le ha atribuido la exclusividad del placer al cuerpo, suponiendo que son los senos, la vulva —hasta hace unos años el clítoris—, así como el pene y los testículos los únicos órganos destinados a ello. Sin embargo, el órgano más importante para experimentar satisfacción resulta ser el cerebro, al contar aproximadamente con 85 mil millones de neuronas conectadas en circuitos responsables de algunos de los comportamientos complejos de los humanos, entre ellos las sensaciones placenteras.
Para mayor comprensión al respecto, la página de Platanomelón, la marca de juguetes eróticos, ha compartido puntos muy importantes de por qué el cerebro es el órgano máximo del placer.
El cerebro y el placer
La mente como fuente de placer: las fantasías
Las fantasías son reconocidas como una manifestación de la sexualidad humana por la OMS, y resultan de especial importancia para la salud sexual. Lo más interesante de ellas es que el gran creador está en el cerebro: la imaginación, que es la habilidad de crear o evocar imágenes, escenas, sonidos y otros elementos que no están ahí tal cual, y se suman elementos sensoriales evocados desde la memoria, que incluyen sensaciones. Incluso pueden reproducirse memorias que no se experimentaron de manera directa.
2. Sólo dame una señal, chiquitx
A nivel físico, para que el cerebro pueda decir: “¡oh!, esto me gusta”, es necesario que reciba diferentes señales a través de las neuronas por medio de estímulos sensoriales. Esto depende de forma directa del sistema nervioso periférico y central. Por ejemplo, en el proceso de autoconocimiento en la masturbación, el cerebro recibe señales de los estímulos y los que detecta que se sienten mejor, los guarda y potencia, enviando impulsos a los nervios y a los músculos.
3. El poder de la mente: para bien y para mal
Acá vamos a hablar sobre cómo se entromete un poco más la mente, que es la que recibe, a través de los procesos cognitivos, toda la educación e información sociocultural, tanto para disfrutar como para no hacerlo.
4. Su funcionamiento impacta en la vida sexual de las personas
El cerebro también se enferma y esto puede deberse a muchas razones, entre accidentes, mal funcionamiento hormonal y más. Hay enfermedades mentales y trastornos neurológicos que afectan las emociones, pensamiento, relaciones y comportamientos que, en consecuencia, afectan la forma de vivir el placer y el deseo sexual.
Vivir plenamente el placer depende de muchos elementos y la magia de la mente, el cerebro y todos los sentidos son la receta perfecta para que, a nivel físico, también se experimente a niveles estelares, por eso importa, e importa mucho, estar presente con mente y cuerpo.